"Y llegó el día en que Emiliano Lagasca se miró al espejo del baño y comenzó a arrancarse las pestañas de cuajo, a tirones limpios y secos. Y los párpados se le descolgaron y comenzaron a sangrar como si los acabase de cortar con unas tijeras de podar las malas hierbas.
Luego, sin apenas poder distinguir nada que no fuese un torrente de sangre, siguió arrancándose el pelo de las cejas, las tenía tan pobladas como el vello púbico. Entonces no soportó el dolor y comenzó a gritar y a dar puñetazos contra el lavabo y el espejo, y éste se rajó en trozos desiguales y concéntricos a los golpes, como una tela de araña acabada de tejer en el reflejo de la desesperación y el odio.
La sangre le lloró en un silencio quieto y se le fueron las ganas de pedir todos los deseos.
A Emiliano Lagasca su mujer siempre le había dicho que por cada pestaña que se le cayera debía soplar y pedir un deseo. Y Emiliano nunca lo había hecho, decía que aquello era una estupidez de niña pequeña. Ahora los quería todos juntos, todos sus deseos, todos el mismo. Y no hacía otra cosa que repetírselo en voz alta, como si haciendo eso fuese a tomar la forma material que añoraba.
- ¡Hija de puta, tienes que morirte! ¡Muérete ya!.
Repetía una y otra vez mientras soplaba con saña cada vello capilar teñido de sangre que localizaba por el baño, e irrumpió en un llanto de recién nacido y las lágrimas se le mezclaron con la sangre. Y ya no supo diferenciarlas.
Mientras tanto su mujer continuaba en el dormitorio, tumbada bocabajo y con dos cuchillos de cocina clavados en la espalda. Cuando los agentes de policía pudieron entrar en la vivienda la encontraron en mitad de un charco de sangre, agonizando; todavía con las fuerzas suficientes para ir arrancándose pestaña tras pestaña y susurrarles muy bajito mientras las soplaba:
- No me quiero morir, no me quiero morir..."
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Uf!! estos escritos impactantes se han de avisar de alguna manera..
Fuerte, muy fuerte..
Increíble.
Me he quedado de piedra ADR, que texto tan IMPRESIONANTE.
No sé si tengo palabras o debo volver .....
Besos a mar.
Uuu que fuerte... ¿cuáles deseos pueden más?
Creo que los de ella, pues era la única que creía realmente en la magia de los deseos.
besos
¡Jopé! Que pareja tan masoca.
Ella tuvo más tiempo para creer que los deseos se cumplen, así que imagino que aún está vivita y coleando, mientras el pobre marido estará pululando por los manicomios.
Abrazos
Lo he encontrado brutalmente genial. Redondo. Me ha encantado. Y eso que ya sabes que los temas sangrientos no me gustan.
Ufff, menuda historia. Espero al final ella tenga más pestañas que él.
Besos
P.D.: A partir de ahora dejare de dar consejos para conseguir lo que deseas, no sea que me pase como en tu cuento.
Espeluznante! Se me han rallado ¿rayado? los ojos. Una pequeña obra maestra. Todo un lujo poder leerte.
Jos..... qué impresión....
Hay que tener cuidado con lo que se desea...
Qué duro jope..
Buf, tremendo...
Mi bisabuela, dicen, tenía la costumbre de arrancarse las pestañas. Por lo demás, afortunadamente, nada que ver...
Abrazos.
Plaplasplasplas!! Nadie de los comentaristas ha dado aún con la solución de tu texto (y no seré yo quien la ponga). De escritor a escritor. Saludos!
¿la solución? ¿qué solución?
Como alguien ha dicho ya por aquí, JOPE!!! Esto se avisa! Rai, de todas maneras me ha gustado, aunque sea un poco fuerte para alguien recién levantado (es mi primer día de vacaciones).
Ya sabes, seguiré pasando por aquí. Entretanto, abrazos.
P.D. Me temo que tampoco veo la solución, y me he quedado con la mosca detrás de la oreja....
¿La solución a qué? Vivo sin vivir en mí...
Yo hacía eso de pequeña.... juro (y mira que no juro) no volver a hacerlo jamás...
Besicos
Antes que nada... la foto es de aquí. Que se me ha olvidado ponerlo en el post.
Y otra cosa:
No sé yo la solución que ha visto Rochester en el relato :D. Para mí tiene diferentes interpretaciones o finales... así que si él da su versión al final de los comentarios...
... yo encantado :)
una más, mejor no, esto es una fábrica de sorpresas... :P
Besitos.
Mantis, gracias. Y bienvenida a Scriptoria :)
Besos.
Silencios, es distinto a lo que suelo sacar, sí :D Lo mejor es que no te deje indiferente. De piedra o de sal... luego reacciona ¿eh? No te quedes petrificada.
Besos.
Nayu, yo creo que los de ella pueden más pero... ¿habrán llegado a tiempo para salvarla?
Besitos.
Trini, yo espero que los deseos de ella hayan cicatrizado las heridas. Desde luego parecían más efectivos que el más afilado de los cuchillos :)
Besos.
dintel, lo sé y, sabiéndolo, me quedo hinchado de satisfacción.
Besitos.
belita, las mujeres siempre tienen más, al menos son más bonitas y largas :)
Besos.
P.D.: Mujer, que no te pase, por Dios... :D
la granota, vaya, ¿una obra maestra? :D Si te acuerdas de este relato cada vez que se te caiga una pestaña... :)
Besos.
P.D.: A ver si Rochester nos dice su versión :D
Wen, y también hay que tenerlo con lo que no se desea, o con no creer en los deseos, claro :)
Besitos creyentes.
39escalones, uf, vaya afición que tenía la mujer... yo suelo soplarlas cuando se caen, sólo eso.
Abrazos.
Rochester, me tienes en ascuas con eso de la solución. A ver si te animas y la pones, porque me has dejado ojo/iplático :D
Abrazos.
Susana, qué buen comienzo de vacaciones has tenido... :D No se te habrán caído las pestañas ¿no? Consérvalas para tus deseos :)
Mientras estás de vacaciones... abrazos y besos.
P.D.: yo estoy esperándola...
Belén, qué niña más dulce tuviste que ser :P
¡No te las arranques! Maquíllalas :)
Besitos.
El relato es....genial, impactante, de película, me ha encantado!
Pero jomíoooooooooo, gore gore que te cagas, que acabo de comerrrrrrr!!!
xDDD!
De verdad, los pelos de punta...
Un beso
Lala
P.D. Creo que ganará él, tendrá más pelos para pedir deseos...
Ay!
Dios mio Angel...me has dejado sin palabras..y ya veo que no soy la unica.
Ese final abierto es de los mios :P Un beso
A partir de ahora maquillaré más a menudo mis pestañas de negro, un negro muy oscuro, para que si en algún momento deciden caerse o llorarme en forma de sangre, al menos, tiñan de azabache mis deseos.
Un besito :)
P.d.: Ya hacía tiempo que no mostrabas este lado tuyo como tú sabes, oscurocasinegro... ;)
Por fin Pbanos sabrá la verdad; te quiero genio
Ahí, ahí está el genio del sur que mucha gente se pierde por no conocer este blog y por no publicar tus libros y relatos. Algún día nos reiremos sobre sus tumbas.
¡Coño, qué bueno!
Perdón por la palabrota.
Joder con Emiliano!! telita!!
Pero me temo que en esto tiene las de perder. Las mujeres tenemos más paciencia yo creo ;)
Un beso!
Me gusta mucho este tipo de relatos que te dejan así...Wow!!
Y de Murakami hasta el momento sólo he leído dos, tu me ganas aún, pero seguiré descubriendo a este autor porque tengo otros libros suyos a la espera...
Un beso guapetón!
y me dices a mi tarantino???
eres grande¡¡¡¡¡
muy grande..
Por favor sigue enseñándome.
Hasta pronto tio.
;-)
Como siempre genial, impactante. Me ha encantado ese final abierto que dejar volar la imaginación.
Así que me arrancaré una pestaña, miraré al infinito y pediré un deseo, que ella no muera. Ese es mi ensueño.
Besico
P.D. También me fascina la forma de escribir Murakami.
Lala, me gusta poner sangre en los relatos que lo requieren, de ese modo se logra un efecto distinto a si no la hay. Y este lo pedía a gritos... o a pestañeos.
Besos.
P.D.: pero ella persevera más ¿no?... mmmm, me has dejado en ascuas.
Bea, a ver si puedo seguir haciendo eso que dices :)
A mí también me gustan los finales abiertos.
Besos.
Sureña, si las tiñes así seguro que no se caen, quedarán preciosas y muy largas. Y a punto de caramelo para cuando necesites pedir tus deseos :)
Besitos.
P.D.: Eso, eso, como el color de mis ojos. Que más de una vez me han dicho que dan miedo (¿tútecree?).
Iván, jajaja. Es cierto, que en aquel duelo te asignó a ti la pluma de este relato... :D
Yo también, poeta.
Roberto, jajaja. La culpa de sacar esta "rabia" violenta en forma de relato es casi toda tuya ¡que lo sepas!. Que me enseñaste muchas cosas cuando trabajábamos juntos :D Y aun hoy día sigues mostrándome infinidad de ellas.
Abrazos, amigo.
Raúl, no hay nada que perdonar, pero si lo hubiera... a ti se te perdona todo, amigo :)
Abrazos.
Virginia, sí, aunque él tenga más pelo, pero la paciencia y el creer en los deseos es al fin y al cabo lo que cuenta.
Besos.
Bohemia, habrá más torbellinos de estos :)
Todavía tengo por descubrir muchas cosas de Murakami. Seguro que me adelantas.
Besos, hermosa.
sueño, Tarantino, sí. Tenemos que aprender mucho el uno del otro :D
Abrazos, tío grande.
Lluviané, me gusta dejar los finales abiertos, a gusto del consumidor :)
Tu ensueño seguro que surte el mejor de los efectos.
Besos.
P.D.: A mí el tío me tiene aprisionado.
A mi la sangre siempre me impresiona mucho, y los dramas que hay tras cada gota y pestaña mucho más...
Ha sido tan explícito que casi me ha salpicado...
(todo un ramalazo muy In anima Vili)
Nhoa, esa era la intención, que salpicara, que estuviéramos ahí junto al protagonista, sufriendo su dolor y su desesperación por quitarse de encima a su mujer, y luego la de ella, por seguir viviendo.
Muy "In Anima Vili", sí.
Si ya dije que Scriptoria cambiaría después de aquel Noviembre de 2008 :)
Besitos.
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