... Y la chica regresaba al bosque a oír historias, a veces nevaba, a veces llovía, y en aquellas tardes sus ojos se volvían de un gris tan claro que en ocasiones parecían blancos.

-Piedra y la chica de ojos azules-

Castillo de Naipes


"Laura cogió la última carta que quedaba en la caja, aguantó la respiración como hacen los cirujanos en los momentos decisivos y se acercó al castillo.

As de picas.

Siempre había dejado esa para el final. Y el de corazones para el comienzo, porque ella, sin el corazón, no era nadie. Era lo primero que ponía en todo lo que hacía. Aunque más de una vez se lo habían partido y ya había perdido la cuenta de las veces que había tenido que reconstruirlo.

Cada noche... la misma historia: recogía de la mesa el plato de comida que le ponía a su hijo, luego se acercaba a la puerta cerrada de su dormitorio, le susurraba un buenas noches que quedaba sin respuesta y, antes de meterse sola en la cama, intentaba en vano levantar su castillo de naipes. Junto a aquella carta soltó con calma todo el dolor que acumulaba.

Era el as de picas.

Esta vez el castillo ni siquiera tembló. El silencio se hizo dueño de su casa y su cuerpo logró ser, al fin, fuerte recipiente de sus propios sueños, de su alma, y del amor por su hijo muerto...
... que de eso ya había pasado mucho tiempo"

*foto de aquí

Sucio Vecindario


"Susana, la del cuarto, sólo hace el amor los viernes por la noche. Para ella hacer el amor es abrirle la puerta a Pablo para que la folle bien durante quince minutos. Lo sé porque antes de que pase eso se asoma a la ventana de la cocina que da al patio. Entonces él la ve, sube desde el tercero y se la folla en la entrada mientras ella esparce sus gritos por todo el vecindario. Yo no sé para qué se asoma a la ventana si ya tienen el ritmo de sus tiempos metido en el cuerpo. Lo hará como un ritual previo al hecho de aparearse. Es que son como animales.

Susana es viuda, pero aún es joven. Pablo está casado y vive con su mujer y sus dos hijos pequeños sin hacer el menor de los ruidos.

Genaro es homosexual. Una tarde se cruzó conmigo en la escalera y me tiró los trastos, pero le dejé bien claro que no caminaba por el lado de la acera que me ofrecía. Tiene un pastor alemán con un pelaje precioso. Se lo compró de bebé, hace justo un año. Ambos se follan casi a diario. Genaro ya ronda los 50 años, pero es como un animal.

En el primero vive Esmeralda, la encantadora y sucia Esmeralda. 16 años. La chica monta fiestas de instituto cuando sus padres salen de viaje de negocios. Cuando todo acaba sube al apartamento de Fernando con más de media botella de ginebra en el cuerpo. Eso no supone barrera alguna para ponerle la polla bien tiesa al viejo. Fernando es viudo, tiene 70 años y su casa huele a bolas de naftalina quemadas.

Y luego estoy yo. Le doy lo suyo a la mujer de Pablo mientras él se folla a Susana. Para encelar a la madre de Esmeralda le doy clases particulares a su hija mientras todos duermen la siesta, aunque todavía no he logrado averiguar quién grita más... si la cerda de la madre o la sucia de su hija. A Genaro le atrae el olor a naftalina, así que cada vez que sube a ver a Fernando me deja a su pastor alemán para que lo cuide...

... y estoy descubriendo que ni al perro ni a mí nos gusta estar ni un momento solos."

*foto de aquí

La Caja de Música

(Las palabras de este texto no tienen sentido si no oyes de fondo la melodía de la Caja de Música)

"Cuando yo era pequeño mi madre tenía una caja de música encima del tocador de su cuarto. Para mí era un sitio prohibido pero yo solía escaparme y, a escondidas, le daba cuerda a la caja. Luego la abría, sostenía un resorte junto a un espejo y colocaba a la bailarina en su sitio.

Entonces liberaba la pequeña palanca y comenzaba a sonar esta melodía. Y con esa edad yo no sabía lo que era estar enamorado, pero viendo danzar a la bailarina podía imaginar cómo podría ser perder a alguien y no poder tenerla nunca más a tu lado. Y, mientras me la quedaba mirando como si yo fuera el soldadito de plomo de aquel cuento, me veía de mayor, paseando con una chica junto al mar, ambos cogidos de la mano.

Eso imaginaba. Como si fuese ayer.

Hace poco, uno de los días en que amanecí temprano en la casa de campo, me puse a revolver en los trastos, y entre ellos encontré la vieja caja de música. Le dí cuerda en silencio, la abrí y puse la bailarina en su sitio, liberé el resorte y la música me trajo mi imagen de pequeño haciendo lo mismo, solo que ahora no tenía que imaginar amores perdidos. Miraba atrás en el tiempo, volvían, y ellos solos se quedaban colgados en cada uno de los giros que daba mi bailarina de plástico."

*foto de aquí

-.-

Sólo decir...

De Caballeros y Brujas


Ella eligió mesa y él se sentó enfrente, dejando una tercera silla para los abrigos.

"- Pues... como te iba diciendo - continuó él-, en el cuento el caballero llega a la ciénaga donde viven las tres brujas, las tres son hermanas, y son tan horrendas que no pueden mirarse al espejo porque no soportan su fealdad.
- ¿Y luego? - preguntó ella.
- Comienzan a lanzar hechizos y maldiciones contra el caballero, pero lo hacen de tal modo que una comienza una frase, la otra la sigue y la tercera la acaba. Es como si tuvieran un solo cerebro dividido en tres cuerpos.
- Ya entiendo.
- El caballero consigue lo que va a buscar a la cabaña de las brujas y para salir se protege con su escudo, que refleja contra ellas sus horribles rostros, de ese modo consigue escapar.
- ¿Te das cuenta?.
- ¿De qué?.
- Es un cuento machista - dijo ella.
- ¿Ah, sí?.
- En tu historia el caballero es el héroe y las mujeres son brujas, feas y malvadas; viven solas y apartadas del resto. Y para colmo deben compartir un cerebro para las tres.
- Bueno, los tiempos han cambiado. Y más contigo.
- ¿Conmigo? Explícame eso.
- Claro, tú siempre me has dicho que eres un poco bruja, y yo añado que muy inteligente y encantadora... En cuanto a mí... bueno, no soy ningún héroe, no tengo que salvar a nadie, y además no me hace falta ningún espejo para guardar el brillo de los momentos que paso contigo."

(La escena del Caballero con las 3 Brujas está sacada de mi cuento "El Caballero y el Dragón")
*foto de aquí