... Y la chica regresaba al bosque a oír historias, a veces nevaba, a veces llovía, y en aquellas tardes sus ojos se volvían de un gris tan claro que en ocasiones parecían blancos.

-Piedra y la chica de ojos azules-

Arena y Sal

Ya conté que esto se llama Scriptoria porque es un homenaje a los lugares donde escribo. Porque todo lo que escribo lo hago en lugares diferentes. Y porque hago Scriptoria todo lo que toco. Cuando estoy harto del portátil cojo mis libretas y cuadernos y escribo en ellos. Me tumbo en el sofá, en la cama, me paro por la calle, escribo y mientras lo hago continúo caminando unos pasos y vuelvo a pararme para que no se me vayan las palabras, las invento en tinta negra y sigo mi camino, donde sea, donde me lleve.

Había una cosa que me faltaba y hoy la he hecho. La playa no estaba llena, se podría decir que estaba vacía. Al menos a mí me parecía eso. Unos niños jugando y una orilla de agua calma, y una suave brisa azotando las palmeras.

Bajé a la arena y vi mi Scriptoria, el de los próximos días. Yo llevaba mi libreta abierta porque hacía viento, y tú me dijiste una vez que sus hojas huelen a mis manos, pero yo quiero que mis manos sean lo más parecidas a las caricias del viento que sopla. Así que dejé que el marcapáginas plateado ondeara al poniente mientras el sol bronceaba estos brazos que rodearon tu cuerpo hace... ¿tanto?.

foto: AdR

Tengo hasta el comienzo del verano para volcar mis letras en este Scriptoria, entonces la retirarán para limpiar la playa; pero esperaré su vuelta. Tu vuelta.

Me acerqué con un sigilo reverencial y me dio miedo tocarla, acaricié su maltrecho cuerpo y me senté junto a ella, en la arena. Con cuidado apoyé mi espalda en su lomo y sentí su calor como había sentido el tuyo, tan dentro.

Abrí mi libreta por una hoja en blanco y escribí todo esto mientras el marcapáginas ondeaba en tu busca, lanzando tequieros al viento.

Y... ¿sabes qué es eso tan blanco que flota sobre la arena? ¿No? Después de probarla me guardé un poco en el bolsillo.

Es Magia.
Es la Sal que fabrica el viento cuando el agua de la bahía se retira a dormir después de que le hayas cantado una nana empapada en tus cuentos. Sale sola.

Fíjate, mientras el viento fabrica Sal a mí me da por fabricar tus sueños. Es que... salen solos.

Paz

foto: AdR

El día que cerré Scriptoria fue doloroso, nada comparado con aquel día en que caminé junto al humo blanco... pero tuve una sensación parecida: la de no poder distinguir lo que había a dos metros por delante de mí: "Ahora necesito todas mis fuerzas para seguir, para afrontar todo esto solo". Yo sabía que volver a estar en paz era cuestión de tiempo.

Scriptoria se había convertido en un refugio, no en el divertimento serio por el que fue creado. Y no quería que fuese un lugar donde meterme y evadirme de temas personales muy importantes. Además, tenía que encauzar a mi Amadeo, prestarle la atención necesaria. Y he tenido tiempo para pensar en él, escuchar lo que me tenía que decir y comprender su existencia... ahora espero poder acabarlo muy pronto. Tiene su propio lugar, y nadie se lo va a quitar.

En este poco tiempo he evolucionado a pasos agigantados, y Scriptoria lo ha hecho conmigo, me he dado cuenta que es una criatura viva, independiente. Mis escritos, una vez volcados aquí, ya no me pertenecen... son Scriptoria. Eso quiere decir que, si en un futuro vuelvo a necesitar de tiempo para mí, esta criatura permanecerá caminando en solitario, que ya sabe hacerlo. Y no volveré a cerrarle puertas, dejaré que vaya a su ritmo.

Veréis cambios en títulos y contenidos de la columna izquierda (Cajones Abiertos, Cerrados, mis Cuadernos, El proyecto de El Hombre Sin Tildes... Amigos), y he puesto más cosas en la estantería de arriba. He querido que esto sea, más que nunca, un Escritorio, una Fábrica. Así es como lo califico en la Bienvenida y en el nuevo Subtítulo.

Se acabó la frustración del escritor, quedó en el olvido.

Creía que iba a tardar mucho más en recuperarme y sentir que podía abrir Scriptoria de nuevo... pero ahora ya estoy en paz. Es eso lo que necesitaba, lo que quería deciros.

Estaré por aquí.