... Y la chica regresaba al bosque a oír historias, a veces nevaba, a veces llovía, y en aquellas tardes sus ojos se volvían de un gris tan claro que en ocasiones parecían blancos.

-Piedra y la chica de ojos azules-

Regalos

Durante mi Dulce Espera podéis disfrutar de estos regalos:

"Consuelo..."



Gracias a mi Sirena :)

"La Incertidumbre del Ser"



Gracias a dos tejedoras de sueños: Pati y Sureña, por hacer este realidad.